Translations! Trraduzioni! Traducerile! Çeviriler!

viernes, 13 de diciembre de 2013

Historia del Periodismo en México


El periodismo en México no es algo que haya surgido de manera espontánea, se tuvo que desarrollar a lo largo de casi 500 años. Uno de los factores que permitió el periodismo fue la llegada de la imprenta, desde Italia, por medio de Giovanni Paoli en 1539.

Los primeros textos informativos que pueden ser considerados como periodísticos aparecieron como hojas volantes, traslados y nuevas o noticias. Eran papeles que contenían crónicas abundantes como información de la muerte de los reyes, el ascenso de sus sucesores al trono, llegada de virreyes, rebeliones indígenas, entre otras cosas.

Los dos siglos posteriores a la llegada de la imprenta supusieron una impresión de papeles públicos de manera ocasional, no periodística. Los primeros “periodistas” fueron conocidos como gacetilleros, publicistas, redactores o escritores, esto en la segunda mitad del siglo XIX.

En 1666 la primer “gaceta” surgió, fue conocida como “Gazeta general, sucesos de este año 1666”, impresa por Carlos de Siguenza y Gongora. Henry Lepidus, autor del libro “La historia del periodismo mexicano”, afirma que “el analfabetismo de las masas y las dificultades que tenían los trabajos de imprenta, retrasaron el desarrollo del periodismo”. Había pocos lectores, censura oficial severa y costo alto para producir los textos. En 1722, Juan Ignacio Maria de Castorena Ursua y Goyenche publicó la “Gaceta de México”, primer papel informativo editado de manera regular.

En la guerra de independencia, se edito “El despertador americano”, bajo encargo de Miguel Hidalgo y Francisco Severo Maldonado. Otros diarios de la época fueron el “Ilustrador americano”, que carecía de recursos técnicos pero utilizaron tinta de añil y tipos de madera fabricados a mano para producir el diario.

El “Semanario” fue el primer órgano teórico de la historia del periodismo político mexicano. En este apareció “Carta de un americano al Español” de Fray Servando Teresa de Mier, alegato en favor de la independencia, la libertad de culto y contra la monarquía.

Luego de la independencia de México y posterior a la caída del imperio, surge la “Gaceta del gobierno supremo de la Federación mexicana”, vocero oficial que relataba las actividades del naciente estado. Al mismo tiempo, surgieron 2 diarios: La águila mexicana, controlada por los republicanos federalistas y El sol, controlado por la logia masónica escocesa y que representaban el inicio del periodismo en México. El Iris fue el primer periódico que apareció con litografías, además de ser el primero donde se usó la caricatura política.

Durante el periodo post-independencia, los diarios se convirtieron en un “critico” abierto y habitual de la política en la nación, al punto de llegar a influir dentro de la misma. Sin embargo, aquellos que estuvieron en contra del régimen en el poder, sufrieron de censura continua, amedrentamientos y otras medidas para conseguir su silencio. Uno de los diarios que mas influencia tuvo durante ese tiempo fue “El Fénix”, que junto a “El sol” se repartieron la guerra de criticas y/o apoyo al gobierno en cuestión.

El diario mas trascendente de la época fue “El siglo XIX”, dirigido por Ignacio Cumplido. En su primera editorial, demandó tolerancia por el interés de todo, pero dejo en claro que el país estaba dividido en dos grandes partidos, de diversas tendencias. Este defendió el voto libre y universal además de que estuvo a favor de la república federal. Recibió varias amenazas, especialmente del ministro de la guerra, José Maria Tornel, que hizo a Cumplido suspender la publicación, hasta que Santa Anna ofreció garantías a los periodistas.

Juan Bautista Morales, conocido como el “Gallo pitagórico” criticaba desde las paginas de “El siglo” a las acciones militares de la Guerra de Texas, que servían también a la opresión al interno del país. Morales fue recluido en la cárcel de la Acordada, acusado de “subvención y traición a la patria”. El día 14 de enero de 1843, se facultó a las autoridades para encarcelar a los periodistas, provocando que el Siglo XIX suspendiera su publicación.

En Julio de 1847, Santa Anna ordeno el cierre de todos los periódicos en el país, a excepción del Diario del Gobierno, esto a causa del continuo ataque de los mismos hacia su persona, acusándolo de inepto y traidor a la patria, por su incapacidad de actuar contra los ejércitos extranjeros.

En un intento mas de coartar la libertad de expresión, el 21 de Septiembre de 1850, el ministro de justicia de ese entonces, José Maria Aguirre, publicó un decreto que hacia casi inexistente la libertad de expresión, donde prohibía que se escribiera en favor de los sublevados y en contra de las autoridades o funcionarios. La mayoría de los gobernadores se negaron a publicar el decreto y la Suprema Corte de justicia juzgó inconstitucional el documento.

Cuando Santa Anna volvió al poder de nuevo, en 1853, publicó la “Ley Lares”, considerada la mas represiva en la historia del periodismo mexicano. Esta ley establecía la censura previa sobre los impresos, el registro de voceadores y expendedores, decenas de requisitos para editar un periódico y severas penas por incumplimiento.

La época comprendida entre el fin de los periodos de Santa Anna y la Reforma, causo una guerra de opiniones y posicionamientos entre los diarios, principalmente en los asuntos referentes a la libertad de culto, la forma de gobernar y la propiedad privada. Uno de los argumentos frecuentes de la prensa solía ser el de “ser la voz del pueblo”, aunque las estimaciones decían que su publico lector apenas era compuesto por el 4 por cien de la población total del país. Los periodistas estuvieron en la mira constante de los poderes en cuestión, objeto de represiones, encarcelamientos, tortura y exilio.

Luego de la restauración de la república y con la caída del imperio de Maximiliano, volvieron a aparecer los diarios liberales como el Siglo XIX, el Monitor, entre otros. Estos años tuvieron como resultado un auge del periodismo satírico. Fue entonces que también proliferó una “prensa obrera” , de carácter socialista, y cuyo principal expositor fue precisamente “El socialista”, surgido en 1871 y desaparecido en 1888. Su principal competencia fue “El hijo del trabajo”.

Luego de su llegada al poder, el periodismo no contaminado por las ideas políticas resultaba altamente útil para Porfirio Diaz, quien hostilizaba a la prensa opositora, perseguía y encarcelaba a periodistas molestos en tanto se portaba generoso con los órganos afines a su caudillaje. Uno de estos diarios era “El Imparcial”, surgido en 1896 y que fue el primero en emplear linotipos y rotativas, privilegiando información, explotando el amarillismo y se vendió a un centavo cada ejemplar, satisfaciendo ampliamente a Diaz. A la caída del porfiriato, los medios afines al régimen criticaron y desprestigiaron la insurrección.

El triunfo del constitucionalismo con Carranza, permitió la proliferación de distintos diarios a lo largo del país, incluidos El norte de Monterrey, El siglo de Torreón, El Universal, etc. Diarios especializados surgieron también como “La Afición”, de corte deportivo y “Cine mundial” de espectáculos. La primera agencia informativa oficial, Notimex, surge en 1968.

De esta manera, nos damos cuenta de lo extensa y sobre todo, tortuosa ha sido la historia del periodismo en México, llena de baches y trabas para poder lograr el ejercicio correcto del mismo, en un ambiente generalmente hostil y que para ser sinceros, parece no haber cambiado mucho con respecto a entonces.

No hay comentarios:

Publicar un comentario